YPF podrá cobrar hasta 3 veces más por el gas que encontró
08/12/2010

Rebosante de entusiasmo, la presidenta Cristina Kirchner miró ayer desde el atril a Jorge Sapag, gobernador de Neuquén. "Jorge, no me vengas a llorar ahora porque vas a tener plata", le dijo. "A mediano plazo", atenuó el neuquino entre el público. "Sí, bueno, a mediano plazo, pero mirá lo que tenés", concluyó la jefa del Estado. Fueron ayer, en un acto en la sede de YPF, las dos versiones del anuncio que celebra en estas horas la industria petrolera: YPF confirmó el descubrimiento de recursos de gas no convencional en la cuenca neuquina y obtuvo, para el proyecto, el compromiso de un precio en boca de pozo que supera en hasta 66% el del plan Gas Plus y en hasta 200% el del fluido tradicional.
Son buenas noticias para el sector energético, cuyas acciones subieron ayer hasta casi un 14% (ver Pág. 4). Señales que se condicen, además, con la percepción empresarial generalizada de una Argentina más amistosa con el mundo de los negocios. Afuera, ya entre periodistas -al acto habían entrado sólo funcionarios y ejecutivos, pero se transmitió en directo-, Sapag se mostró más alentador. "Esto nos va a permitir pasar de ser un país con gas a uno gasífero", dijo, y agregó datos que adentro nadie había suministrado: el acuerdo, firmado entre las provincias, los sindicatos y el Ministerio de Planificación, prevé una banda de precios de entre 4,5 y 7,5 dólares el millón de BTU. El piso, dice el texto, es lo que se paga por el plan Gas Plus, un programa de exploración que no tuvo el éxito arrollador que esperaba la Casa Rosada. El techo es lo que a la Argentina le cuesta importarlo de Bolivia o de los buques que llegan a Bahía Blanca.
La Presidenta volvió a cautivar a los empresarios. La escuchaban, entre otros, Alejandro Bulgheroni (Pan American Energy), Cristiano Rattazzi (Fiat Auto) y Adelmo Gabbi (Bolsa de Comercio). Se emocionó y recibió aplausos al aludir a la muerte de Néstor Kirchner ("No me está yendo muy bien en términos personales"), y elogió a la familia Eskenazi: "El management ha cambiado con la incorporación de un socio local. Es increíble, pero algunos lo criticaban. Debe servir para animar a otros, sin despreciar a los extranjeros. Al contrario, ambos se deben articular".
Lo primero que hizo ayer YPF fue anunciar a la Bolsa dos descubrimientos:
Recursos de tight gas (gas de arenas compactas, más caro de extraer), estimados en unos 4,5 trillones de pies cúbicos (más de un tercio de lo que tiene la Argentina), luego de perforaciones en cuatro pozos en el yacimiento Loma La Lata, en Neuquén. Sebastián Eskenazi, CEO de YPF, dijo que el proyecto podría elevar de 6 a 16 años las reservas de gas de la compañía. En la empresa aclararon no obstante que, al no estar certificado, no se puede aún llamar "reserva" al hallazgo.
Pruebas y datos en dos pozos de shale gas (gas en arcillas, también más caro) en Vaca Muerta, Neuquén, con condiciones similares a cuencas productivas de shale gas y shale oil en Estados Unidos.
La empresa informó además que, por primera vez en 12 años, había logrado revertir este año la tendencia de declinación de su producción de petróleo y que estimaba reemplazar, por primera vez en 13 años, en un 100% el crudo extraído en el año.
Para los petroleros, el escenario es óptimo, pero requiere de compromiso normativo. El principal riesgo ya maniató el plan Gas Plus: en los últimos inviernos, el Gobierno les pidió que volcaran el gas más caro -el que pagan las industrias- a la red domiciliaria a un valor cuatro veces inferior. ¿Habrá ahora una nueva Argentina, como dijo ayer Sebastián Eskenazi delante de la Presidenta y parte del Gabinete? ¿O volverán las llamadas del secretario Guillermo Moreno?
He ahí la gran duda petrolera, que La Nacion le trasladó a Enrique Eskenazi, padre de Sebastián y vicepresidente de YPF. "¡Eso se llama racionalidad política! Si no hay racionalidad política, todo es un salto al vacío", contestó. Vale la pena escuchar al banquero, uno de los empresarios más frontales que tiene el país. "Es hora de que en la Argentina empecemos a decir la verdad", se entusiasmó en el cóctel, y auguró muy buenos años de crecimiento.
La mejora en el precio, decisiva para la viabilidad del proyecto, fue negada por el ministro de Planificación, Julio De Vido, después de la publicación de lanacion.com .ar. "No se acordó ningún precio nuevo para el gas -dijo a Télam-. El gas seguirá costando lo mismo que hasta hoy." El arquitecto criticó al diario, pero ratificó lo publicado y los términos del acuerdo: "La Nacion vuelve a mentir una vez más, intentando confundir a la opinión pública sobre nuevos precios de gas, cuando en realidad sólo se estableció una banda de referencia para un tipo de gas que todavía no se produce en la Argentina. Quien lo quiera comprar deberá negociarlo en esa franja. Estas bandas tienen como piso los precios del programa Gas Plus y, como máximo, el gas que se importa de Bolivia".
El convenio dice exactamente eso. Sapag agregó que quien decidirá el valor en esa franja de entre 4,5 y 7,5 dólares será "la Secretaría de Energía", y que es probable que el gran comprador del volumen sea Cammesa, la administradora del mercado eléctrico, con fondos del Estado.
CLIENTE BRASILEÑO PARA EL GAS NEUQUINO
El gas que se produzca en el yacimiento neuquino será utilizado en parte para el desarrollo de un proyecto de potasio de la minera brasileña Vale, en el sur de la provincia de Mendoza. Según reveló Sebastián Eskenazi, vicepresidente ejecutivo de YPF, los brasileños pagarán por el fluido entre 4 y 5 dólares por millón de BTU. "El contrato que tenemos con Vale está entre 4 y 5 dólares, o sea que se va a pagar menos que el gas que se importa, pero más que el gas convencional", señaló el empresario. Por ese contrato, Vale e YPF invertirán en conjunto US$ 150 millones para producir un volumen de 2 millones de metros cúbicos por día.
(La Nación)
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