Vilariño destacó la primera condena en Salta por delitos cometidos durante la dictadura
Vilariño manifestó su satisfacción por la condena y destacó que se trata de un fallo “a favor de la memoria, la verdad y la justicia” y que “es un triunfo para las organizaciones de derechos humanos, de la familia de Bustos y la sociedad toda”.
Aldo Melitón Bustos fue secuestrado en su casa de Tartagal en la madrugada del 2 de febrero de 1978. El principal testigo fue su hijo Raúl Federico Bustos, quien tenía dieciséis años y reconoció a Arias entre los captores. Un segundo testigo, Juan Domingo Javier, declaró que vio desde treinta metros cuando dos hombres llevaban por la fuerza a un tercero e identificó a Arias y a Bustos, a quienes conocía del bar donde trabajaba. Javier declaró que cargaron a Bustos en un auto Opel amarillo o naranja, similar al que utilizaban los grupos de tareas del Regimiento de Infantería de Monte 28 de Tartagal, que comandaba en forma interina Zírpolo.
“Siento una satisfacción tremenda” dijo Vilariño. “Lo significativo para la construcción democrática de nuestra sociedad es que estos genocidas que, durante ese período negro de la historia, ejercían poder absoluto sobre la vida y la integridad de miles de argentinos, puedan hoy ser juzgados y condenados con todas las garantías constitucionales”- expresó el legislador en un Proyecto de Resolución presentado en la Cámara de Diputados de la Nación.