Locomotora arrolló a dos motociclistas y uno falleció
12/08/2010
El sobreviviente, Ariel Muñoz, de 14 años, fue trasladado en grave estado al Hospital de Niños. El muerto no fue identificado.
El accidente se produjo en el paso sin barreras situado en la intersección de Usandivaras y Francisco Castro, en la zona oeste de la capital, a las 20.45. El motociclista se desplazaba en un rodado Maverick de 110 centímetros cúbicos de cilindrada, en compañía de un chico de 14 años, identificado como Ariel Muñoz, con domicilio en el barrio San Silvestre, quien fue trasladado de urgencia al Hospital de Niños, con diagnóstico de politraumatismo general, fractura de tibia y peroné y aplastamiento de tobillo.
El conductor de la unidad siniestrada murió por aplastamiento de cráneo y su cuerpo quedó convertido en una masa informe bajo las pesadas ruedas de la máquina, perteneciente a la empresa Belgrano Cargas, que se hallaba al mando de Ramón Pedroza y que realizaba las tareas de “vigía” de la formación del Tren a las Nubes, cuyos pasajeros -un 70% de ellos nacionales y un 30% extranjeros- debieron ser apeados en la Estación Alvarado, 10 kilómetros antes del punto de impacto y trasladados al centro de la ciudad en combis.
El gerente de la firma Ecotren, que explota el circuito, Juan Cabrera, deslindó toda responsabilidad de la empresa en el siniestro, aduciendo que la seguridad y el control de los pasos a nivel, con o sin barreras, son potestades del Belgrano Cargas y la Municipalidad de Salta.
El Samec movilizó al lugar dos ambulancias, a cargo de los médicos Ana García y Miguel García, quienes demoraron dos y cuatro minutos en constituirse en el lugar.
Los banderilleros, Esteban Michel y Jorge Herrera, dijeron que el conductor de la moto no hizo caso a las señales y se lanzó a cruzar las vías, sin lograrlo.
En el caso tomó intervención el juez federal 1, Julio Leonardo Bavio.
Personal de Criminalística de la Policía se hizo cargo de las pericias. Al cierre de esta edición se estaban terminando de levantar los restos del joven fallecido, que aún no había podido ser identificado.
¿Por qué tanta irresponsabilidad?
De acuerdo con los informes proporcionados por las autoridades policiales, en base a testimonios aportados por transeúntes que vieron lo ocurrido, los dos jóvenes que fueron arrollado por la máquina no hicieron caso a las señales de los banderilleros.Los investigadores creen que el que conducía -a juzgar por sus contextura- era también un menor y que, al ver a los banderilleros con sus chalecos reflectantes, podría haber pensado que se trataba de un control de tránsito y como no quería someterse a una inspección en vez de detenerse aceleró.
(El Tribuno)
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